¿Porque votar por Calderón?

Mucha gente me ha preguntado, ¿Porque debo votar por Calderón?, la respuesta es simple, ¡Porque yo lo digo!, pero para que estén mas contentos, Calderón representa una continuidad en las políticas de gobierno actuales, ¿Porque queremos seguir como hasta ahora?....Aquí les doy unas cuantas razones...

Gobierno democrático e incluyente

Antes, no se vivía una auténtica división de poderes, sino que el Presidente imponía todas sus decisiones.	Hoy, existe un equilibrio y división entre los Poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, tal y como lo señala la Constitución.
Antes, el Presidente hacía todo lo que quería, y había un centralismo absoluto en la toma de decisiones.	Hoy, los gobiernos locales viven su autonomía, ejecutan sus competencias y cada vez ejercen un porcentaje mayor de recursos.
Antes, se llevaban a cabo elecciones de Estado, controladas desde el poder, con resultados sistemáticamente cuestionados.	Hoy, a nivel federal, vivimos en un régimen democrático, con elecciones libres y competitivas e instituciones electorales independientes del Ejecutivo.

Libertad de expresión

Antes, las voces disidentes eran acalladas. Muchos periodistas y políticos de oposición fueron asesinados por el régimen priísta (Manuel Buendía, Carlos Loret de Mola, Jesús Piedra Ibarra, el Cardenal Juan Jesús Posadas…)

Hoy, la libertad de expresión respira en todos los espacios del país y en todos los ámbitos del quehacer ciudadano.

Gobierno transparente

Antes, el gobierno no estaba obligado a dar información ni a rendir cuentas.	Hoy, contamos con una Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental y con el Instituto Federal de Acceso a la Información Pública, que garantizan el acceso a la información gubernamental.
Antes, no existía una dependencia pública federal que se ocupara de promover la participación de las mujeres en todos los ámbitos de la sociedad.	Hoy, contamos con el Instituto Nacional de las Mujeres, órgano encargado de la generación de políticas que garanticen la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres.

Gobierno moderno e innovador

Antes, México era identificado por tener un gobierno burocrático.	Hoy, nuestro país recibe reconocimientos mundiales por su estrategia de Gobierno Electrónico.
Antes, la ubicación de los funcionarios en la Administración Pública Federal dependía de criterios políticos, de amigos o compadrazgos.	Hoy, las designaciones se basan en un cuidadoso análisis del perfil de los puestos y de los candidatos a ocuparlos, con la aprobación de la Ley del Servicio Profesional de Carrera.

Economía moderna y fuerte

Antes, México no era un lugar confiable para los inversionistas.	Hoy, las principales calificadoras confirman a México como un lugar seguro y confiable para la inversión.
Antes, nuestra economía era inestable y había crisis recurrentes que dejaban en la pobreza a miles de familias.	Hoy, tenemos una economía estable y que se maneja de forma responsable, sin crisis de fin de sexenio.
Antes, la economía era manejada de un modo autoritario y populista.	Hoy, las instituciones financieras son sólidas y en muchos casos autónomas.

Precios estables

Antes, los precios podian subir hasta el doble en sólo un dia, las tasas de inflación llegaron a estar en niveles del 130%.

Hoy, las familias pueden estar mas tranquilas pues los precios se han mantenido constantes en los últimos años, tenemos la inflación más baja de la historia, con 3.3%.

Moneda (peso) fuerte

Antes, nuestra moneda se devaluaba a cada rato respecto al dólar

Hoy, tenemos una moneda fuerte y estable.

Próximas generaciones con menos deuda

Antes, en 1995, la deuda externa era de un 32.4% de nuestro PIB.

Hoy, la deuda externa es de solamente el 9.4% del PIB.

Reducción real de la pobreza

Antes, la política social se utilizaba de forma clientelar y partidista, y no servía para reducir verdaderamente la pobreza. Al contrario, antes había cada día más pobres.

Hoy, tenemos una política social transparente y eficiente que ha permitido que 5.6 millones de mexicanos superaran la pobreza alimentaria, según lo constata el Banco Mundial.

Servicios de salud para más familias

Antes, la atención a la salud estaba condicionada a un empleo formal en un país donde sólo 44.2% de la población es derechohabiente de la seguridad social.

Hoy, más de 2 millones de familias tienen atención médica y medicinas, y serán 5 millones al terminar el sexenio.

Reconocimiento a pueblos indígenas

Antes, los pueblos indígenas eran discriminados, cuando no perseguidos y reprimidos, como cuando se produjo la matanza de Acteal o la de Aguas Blancas.

Hoy, tenemos una Ley por la que se creó la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, y un incremento sustancial del presupuesto destinado a comunidades indígenas. Hoy tenemos una Constitución que reconoce a los pueblos y comunidades indígenas, que exige al Estado mexicano diseñar instituciones y disminuir desventajas en su desarrollo.

Educación de calidad

Antes, la calidad de nuestra educación pública era nefasta y se quedaban sin acceder a ella las personas que no contaban con recursos económicos.

Hoy, se cuenta con un Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación y con más de 20 mil escuelas de calidad que incorporan nuevas tecnologías y fomentan la participación de las familias en la comunidad educativa. Hoy, se otorgan millones de becas para que todo aquel que haga su parte en el esfuerzo tenga la oportunidad de estudiar.

Vivienda digna

Antes, las instituciones de vivienda no cumplían su labor, y sus funcionarios se enriquecían impunemente.

Hoy, existe un mayor acceso al crédito y mejores tasas y plazos, produciéndose en los últimos años una verdadera revolución en el acceso a vivienda en México.

Seguridad para los ahorradores

Antes, vivimos fraudes y quebrantos en las cajas populares, había un limitado acceso a los servicios financieros e incertidumbre jurídica.

Hoy, tenemos una Ley de Ahorro y Crédito Popular que regula y supervisa a las organizaciones del sector, y un Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros, para apoyar a las instituciones de ahorro y crédito popular.

Lucha frontal contra el narco y la delincuencia

Antes, los gobiernos priístas y las bandas de narcotraficantes estaban coludidas y en franca complicidad.	Hoy, los principales capos del país están en la cárcel y se han desarticulado decenas de bandas de narcotraficantes.
Antes, las carreteras federales eran inseguras y estaban repletas de delincuentes.	Hoy, los asaltos en carreteras federales han disminuido en un 72% en los últimos años.

Si con estos hechos no entran en razón es porque de plano tienen el cerebro de adorno y lo mejor es que se tiren a un pozo.

Fuente: No Te Olvides